Un día después de que el presidente Jair Bolsonaro tenga que reconocer la derrota, manifestantes bolsonaristas mantienen cientos de cortes de ruta en todo el país.

Las manifestaciones denuncian un supuesto fraude electoral perpetrado por el Supremo Tribunal Federal, y exigen a las Fuerzas Armadas que hagan un golpe de Estado.

Esta mañana se mantenían unos 150 bloqueos en las rutas del país por parte de los partidarios de Bolsonaro. Pero llegaron a alcanzar los 235 cortes ayer, antes de que el presidente hable por primera vez luego de más de 48 hs. de silencio.

La reducción en el número de cortes se debe a que Bolsonaro no tuvo margen para desconocer el resultado electoral, lo que desalentó parcialmente las protestas. Pero también a que la justicia ordenó desalojar algunos bloqueos con la Policía de Carreterras. Otros cortes fueron quebrados directamente por la acción popular en repudio al golpismo, y también hubo enfrentamientos con hinchadas de fútbol.

A pesar de todo, un importante sector mantiene los bloqueos, convencidos de que las palabras de Bolsonaro, en realidad, fueron un llamado a manifestarse. El mandatario calificó las protestas como producto de la «indignación» frente a las «injusticias por parte del tribunal electoral», coqueteando con las denuncias de fraude que ahora levantan sus seguidores. Sin embargo, también debió admitir que comenzará el proceso de traspaso de mando y que se «ajustará a la Constitución».

Mientras tanto, algunos sectores de su base social se radicalizan. Las manifestaciones están siendo convocadas ahora directamente frente a los cuarteles del Ejército y las FF.AA. La principal consigna es «intervención federal ya». Les piden a los militares que hagan un golpe de Estado para impedir la asunción de Lula, quien triunfó en las elecciones del pasado domingo.

«Venimos a pedirle al Ejército que haga una intervención federal en las instituciones de Brasilia, en la justicia electoral, que se vote nuevamente porque hubo fraude.», declaró a Télam uno de los organizadores de la protesta frente a los cuarteles de San Pablo.

Los bloqueos golpistas se extienden a 17 estados del país. El que más registra es el de Santa Catarina, donde las rutas están cortadas en 35 puntos diferentes.

En uno de ellos pudo verse a seguidores de Bolsonaro haciendo el saludo nazi mientras cantaban el himno nacional de Brasil. Las imágenes se viralizaron rápidamente por las redes sociales.

Las imágenes de bolsonaristas haciendo el saludo nazi conocido como ‘seig heil’ no sólo generaron un amplio repudio social, sino también la intervención de la justicia, ya que la apología del nazismo está penada por ley en Brasil.

Tras el breve discurso de Bolsonaro y las acciones pro-golpistas de sus seguidores, ahora la atención gira en torno al presidente electo, Lula da Silva, quien ha evitado hacer declaraciones sobre los últimos sucesos. Mucho menos convocar a algún tipo de contra-marcha contra las movilizaciones golpistas de los bolsonaristas.

A pesar de la derrota electoral, que el bolsonarismo sea el que haya ocupado las calles no deja de constituir un riesgo grave que mantiene la incertidumbre sobre el futuro político. La derrota de Bolsonaro en las urnas exige coronarla con una gran movilización popular contra el golpismo y en defensa de los derechos democráticos.