El miércoles el ejército de Israel llevó a cabo una incursión nocturna con tanques en el norte de la Franja de Gaza. La incursión fue limitada y, según Israel, no tuvo víctimas civiles, algo muy difícil de creer. El objetivo del ejército sionista es preparar una invasión terrestre a Gaza.
Es la primera vez que Israel ha llevado a cabo una incursión terrestre en Gaza desde 2014. La incursión podría conducir a una escalada del conflicto, con consecuencias potencialmente catastróficas para el pueblo palestino.
In preparation for the next stages of combat, the IDF operated in northern Gaza.
IDF tanks & infantry struck numerous terrorist cells, infrastructure and anti-tank missile launch posts.
The soldiers have since exited the area and returned to Israeli territory. pic.twitter.com/oMdSDR84rU
— Israel Defense Forces (@IDF) October 26, 2023
Se prepara un nuevo capítulo del genocidio palestino
Según el ejército israelí la incursión fue llevada a cabo por la Brigada Givati y los soldados israelíes atacaron posiciones de Hamás en el norte de Gaza. Tampoco se reconocieron victimas civiles en la incursión. Pero no caben dudas de que esto es una clara mentira, la incursión nocturna fue en una zona densamente poblada.
El mal llamado «conflicto armado entre Israel y Hamás» comenzó el 7 de octubre. En todo este tiempo, el Estado racista de Israel ha llevado a cabo una campaña de bombardeos contra Gaza. Ya ha causado la muerte de más de 6.500 palestinos, la mayoría civiles.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo que la incursión fue «un grave deterioro de la situación» y pidió a ambas partes que «se abstengan de cualquier acción que pueda conducir a una mayor escalada». Claro está que no hace otra cosa que emitir comunicados de preocupación. Esta claro que no se trata de dos partes que libran una guerra en igualdad de condiciones, sino de un liso y llano genocidio de un Estado racista contra un pueblo oprimido.