Lejos de pensar que era un detalle de los lujosos atuendos que suelen llevar a la gran premier trascendió que el pequeño broche de color rojo con el dibujo de una mano y un corazón negro dentro correspondía al apoyo de un alto el fuego en Gaza. El genocidio perpetrado por el Estado de Israel contra los palestinos ya se llevó más de 30 mil vidas solo desde el 7 de octubre.
«El pin simboliza el apoyo colectivo a un cese del fuego inmediato y permanente, a la liberación de todos los rehenes y a la entrega urgente de ayuda humanitaria a los civiles de Gaza» afirmó un comunicado de prensa de Artists4Ceasefire, una campaña a la que se unieron más de 400 celebridades y de la cual se publicó una carta que insta al Congreso de Estados Unidos y al presidente Joe Biden a pedir un cese del fuego inmediato en ambos países.
Fue así que la denuncia al genocidio en la Franja de Gaza se coló en la alfombra roja. Actores, productores, cantantes y todo tipo de miembros de la Academia de Cine como Billie Eilish, la directora Ava DuVernay, la estrella de Poor Things, Mark Ruffalo, Ramy Youssef y muchos más, lucieron junto a sus prendas su pin.
La gala de los Oscar, que todos los años atrae la mirada de muchos millones desde hace muchos años, ya se ha hecho eco antes de lo que pasa en el mundo. Y si bien las «celebridades» suelen más bien ser gente que vive en una cómoda burbuja y solamente busca atención, no es menor que se hable de Palestina. La posición oficial yanqui es férreamente sionista, el personal institucional de Estados Unidos se alinea sin fisuras en defensa del genocidio. La cultura del cine, y la burbuja de las celebridades, refleja mucho más la opinión pública estadounidense que su «democracia».