• La Contraloría estimó que el próximo año la deuda pública alcanzará el 74% del PIB y que se mantendrá por encima de 50% durante los próximos 10 años.

Johan Madriz

La Contraloría General de la Publica estimó que el próximo año la deuda pública alcanzará el equivalente al 74% del PIB y que se mantendrá por encima de 50% durante al menos los próximos 10 años.

Esta estimación se realiza a partir de considerar la aprobación del plan de ajuste fiscal del gobierno, dentro de lo que incluyen las medidas pactadas con el FMI, dentro de las cuales están la imposición de un impuesto a las ganancias por loterías, la reforma del impuesto a las casas de lujo, la eliminación de la exoneración de renta del salario escolar del sector público, la ley de empleo público, la eliminación de plazas vacantes y el congelamiento de pensiones del gobierno.

Si se aplican estas medidas la Contraloría estima que en 2026 la deuda bajaría al 68,5% del PIB, caso contrario sería de 74,7%.

Entre 2008 y 2018 la deuda publica pasó de un 24% a un 54% del PIB. Al 2020 representaba un 67% del PIB, con un crecimiento nominal de 11,26% y alcanzando los 29,79 billones de colones. La deuda interna creció un 10,02% a 22,19 billones de colones y la deuda externa llegó a 12.335,53 millones de dólares con un incremento de 7,16%. Durante el 2020 se aprobaron cuatro préstamos externos por 1.401,69 millones de dólares.

Ante esto las medidas del gobierno van en el sentido de aplicar medidas de ajuste contra los sectores mas desfavorecidos. La misma Contraloría expresa que hay un gran riesgo por lo prolongado de las medidas de contención del gasto que afectan las funciones del Estado, además, se observa un incremento sostenido de la deuda gubernamental con la CCSS.

Según la Dirección de Cobros de la CCSS el monto adeudado del sector privado es de 519 mil millones de colones. Por su parte el Estado mantiene una deuda de 2,2 billones de colones al 31 de marzo de 2021 (aunque el Ministerio de Hacienda solo reconoce 191 mil millones de colones), además, la Contraria advirtió que en el primer cuatrimestre del año las transferencias corrientes del gobierno hacia la CCSS disminuyeron un 34,20%.

La deuda ha sido utilizada por el gobierno en beneficio de los intereses empresariales y no del conjunto de la clase trabajadora y los sectores populares, por lo que es urgente detener la sangría de recursos que se utilizan para pagarla, ya que ese es el verdadero causante del desbalance fiscal. Además, hay que luchar contra el plan de ajuste del gobierno y el FMI que son creadores de pobreza, la regla fiscal y los demás proyectos atacan derechos conquistados por la clase trabajadora. Hay que exigir un cambio en el sistema tributario del país, donde sean las grandes empresas y las fortunas las que paguen la crisis.