- Ante el proyecto del gobierno para tomar parte de sus ganancias para pagar deuda proponen desfinanciar a Conape, CNE, Infocoop e IVM.
Johan Madriz
Se encuentra en tramite un proyecto de ley del gobierno, acordado con el FMI, para que 14 instituciones estatales destinen hasta el 30% de sus ganancias anuales al pago de la deuda publica durante cuatro años. Con esta medida se pretende una amortización de ₵72.600 millones anuales.
Dentro de las instituciones que afectaría esta reforma están el Banco Nacional (BNCR) y el Banco de Costa Rica (BCR). Los bancos públicos, actualmente, destinan un 33% de sus ganancias (unos ₵22.500 millones) a cargas parafiscales: 5% a Conape, 3% al CNE, 10% a Infocoop y 15% al IVM.
El proyecto planteado además le resta capacidad de acción a empresas públicas como CNFL, AyA, ICE, Incofer, Incop, Recope, Correos de Costa Rica o la Editorial Costa Rica que tendrían que destinan una buena parte de sus ganancias al pago de la deuda.
Tanto los bancos como la Superintendencia de Entidades Financieras (Sugef) se oponen al proyecto alegando que los inestabilizaría al reducir sustancialmente las utilidades disponibles. Ante esto emitieron tres contrapropuestas.
- La Sugef, comandada por Rocío Aguilar, propone congelar el traslado de recursos a los destinos específicos y solo asumir la contribución para amortizar la deuda.
- Los bancos formulan reducir a la mitad las cargas destinadas a Infocoop, Conape y CNE, con lo cual sus obligaciones parafiscales pasarían a ser del 24% de las ganancias.
- Ambos bancos también plantean el escenario de eliminar completamente las cargas y establecer un único aporte al Estado y que el gobierno defina la forma de distribución según sus necesidades.
Todas estas opciones tienen como punto común desfinanciar programas: prestamos estudiantiles, pensiones, atención de emergencias y financiamiento a cooperativas. En caso de eliminarse o reducirse el aporte bancario el gobierno no cubrirá los faltantes generados, poniendo en peligro la continuidad de los servicios brindados por estas instituciones.
En el sistema bancario nacional tiene una gran desigualdad entre los entes público y los privados, ya que las contribuciones parafiscales las deben pagar solo los bancos públicos. Seria oportuno extender estas a la banca privada para fortalecer los programas sociales necesarios para mejorar las condiciones de vida de los sectores populares.
No hay que seguir saqueando al país para pagar la deuda. Los bancos públicos deben aportar más, pero no para asegurar las ganancias de unos cuantos empresarios. Es necesario suspender el pago de la deuda externa y la que se encuentra en manos privadas, además de luchar contra el plan de ajuste del gobierno que recarga el peso de la crisis sobre la clase trabajadora.
