
- Esta semana se rompieron récords de altas temperaturas en países del hemisferio norte. Al calor se le sumó el viento y se generaron focos de incendios forestales.
Virginia Bertoldi
Las consecuencias del cambio climático están cada vez más claras. Esta semana una ola de calor azotó a los países árticos de América del Norte y en Europa. El miércoles en Canadá se registró una temperatura de 49.6°C, lo que provocó la muerte de casi 400 personas. Al mismo tiempo, en los países del sur llegó una ola polar. Estas condiciones se deben a una «cúpula de calor» que abarca el oeste de Canadá y partes del noroeste del Pacífico de Estados Unidos.
Al otro lado del Océano, en Moscú, esta semana también llegó una ola de calor como hace 120 años no se veía. La temperatura marcó un máximo de 34.7°C, un máximo histórico del mes de junio llegada en 1901, y anuncian que podría llegar a superar los 35°C el fin de semana. En Europa del Este y Siberia, países reconocidos por sus temperaturas bajas debido a la cercanía con el ártico, la temperatura superó los 30° y como consecuencia hubo personas que se murieron ahogadas en búsqueda de refrescarse en el agua de ríos y piletas.
Mientras tanto en el Hemisferio Sur, nevó en lugares insólitos de la provincia de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe. El martes 29 se lanzó advertencia violeta por las bajas temperaturas que se registraron en gran parte de Argentina.
La «cúpula de calor» en Canadá es, básicamente, un área donde hay demasiada presión y el aire caliente que permanece en lo alto de la atmósfera. Estas son cada vez más frecuentes en la medida que los gases del efecto invernadero hacen que aumenten las temperaturas globales y que duren más tiempo.
Para enfrentar el calor, en Estados Unidos y Canadá abrieron centros especiales para que las personas puedan ir a refrescarse y cerraron escuelas. Particularmente en la zona canadiense escasean los ventiladores y aparatos de aire acondicionado. La falta de ventilación fue la principal causa de muerte para las personas mayores.
Como muestra nuestro trabajo previo, los Eventos de “Calentamiento Estratosférico Súbito (SSW)” pueden afectar la concentración de ciertos gases en la alta atmósfera sobre el #Artico, incluida la concentración de #Ozono👇 https://t.co/qj8E5qaOXj
— Antarctica.cl (@Antarcticacl) January 9, 2021
Además de las pérdidas humanas, estas altas temperaturas ponen en riesgo los bosques. En Estados Unidos se detectaron más de 36 focos de incendios. Particularmente en Lytton, Canadá, donde se registraron las mayores temperaturas, se inició un incendio que en menos de 15 minutos se propagaron por todo el pueblo. Sus 250 habitantes tuvieron que ser evacuados sin nada en mano.
Cambio climático
Las consecuencias de la devastación de la naturaleza son cada vez más claras, y los expertos advierten que estos extremos de temperaturas serán cada vez más seguido. También hay que advertir que cuando se habla de calentamiento global, no quiere decir solamente la suba de temperaturas.
El Ártico es una de las zonas claves para entender esta situación, ya que es un engranaje clave para el funcionamiento del sistema climático mundial. Cualquier cambio en esta región tiene repercusiones en todo el planeta, y hoy, a diferencia del resto del mundo, se está calentando dos veces más rápido: el hielo marino ártico se redujo a la mitad desde 1979. Esto hace que el nivel del mar crezca y genere grandes flujos de calor que aumentan la temperatura de las capas atmosféricas árticas.
Además, en esta zona se encuentra el vórtice polar ártico, que mantiene el aire frío del hemisferio norte separado de las masas cálidas por la presencia de la corriente en chorro -una franja de aire formado por la diferencia de temperaturas que fluye rápidamente de oeste a este-.
El portal ecologista «El Ágora» explica que «con la llegada de las temperaturas gélidas nacidas por la ausencia de sol, el vórtice se fortalece en invierno, creando una región estable fría alrededor de su eje de rotación localizado en el Ártico. Sin embargo, esa estabilidad puede llegar a romperse por calentamientos repentinos de la estratósfera que, de forma simplificada, desencadenan ondulaciones por el cambio en la fuerza de los vientos de la corriente en chorro». Estas ondulaciones, si son negativas, hacen que se arrastre el frío polar hacia latitudes más bajas.
Astounding heat obliterated all-time records across the Pacific Northwest and Western Canada in late June 2021.
Learn more about how this region got so hot from @NOAAClimate: https://t.co/1yaIIWwSoK pic.twitter.com/8ovAji8WmW
— NOAA Research (@NOAAResearch) July 1, 2021