¡Nuestro feminismo socialista no ampara golpes de Estado!

En las primeras horas del día 21 de noviembre se hizo viral la posición de la conocida antropóloga Rita Segato sobre los acontecimientos que están ocurriendo en Bolivia.

Más de una semana ha transcurrido de que los sectores más retrógrados, racistas y reaccionarios de Bolivia se hicieran con el estado, a través de las fuerzas armadas, militarizando, reprimiendo, cometiendo masacres como en Sacaba y anoche mismo en Senkata. La autoproclamada “presidenta” Áñez, biblia en mano, pisoteando la Whipala, es solo una expresión “civil” de un golpe en toda regla. Las imágenes de los militares gaseando, baleando sobre las multitudes que se levantan contra el golpe dan cuenta del revanchismo contra toda la población originaria.

Segato argumenta que no defiende al gobierno de Evo Morales, saca a relucir su machismo, los incendios de la Chiquitanía y tantas otras cuestiones de su gobierno… todo para justificar su posición de que en Bolivia no hay un golpe, sino que Evo cayó por sus propios errores y luego otros sectores tomaron el gobierno por el vacío de poder. ¡Cuánto cinismo!

La defección de Morales, renunciando y luego huyendo a México, dejan en claro que el golpe es contra el pueblo: las masacres continúan, la represión continúa. Y junto con esto, el heroico pueblo boliviano se ha puesto de pie y como ya lo ha hecho en otros momentos, se levanta una y otra vez contra el opresor.

Nuestra compañera Manuela Castañeira, junto con una delegación de la Corriente Internacional Socialismo o Barbarie está acompañando en La Paz las movilizaciones del pueblo. Rápidamente Manuela contestó: la población trabajadora sale a las calles en defensa de la Whipala, más que de Evo Morales.

Las imágenes de las mujeres de pollera enfrentando sin escudo y sin armas a los militares estremecen por su valentía. Y claramente contrastan con la bajeza de Segato.

Nuestro feminismo socialista no defiende golpes de estado. Con las masas boliviana decimos ¡Jallala las mujeres de pollera! ¡Viva la heroica rebelión del pueblo boliviano contra el golpe racista! ¡Fuera Áñez!