• El coronavirus causó la muerte de más de 15 mil personas en Brasil. El país ocupa el cuarto lugar en el ranking de las naciones más afectadas por el nuevo virus. En esta competencia mortal que muestra la ineficacia del sistema capitalista, el país tropical está compitiendo con los Estados Unidos, Rusia y el Reino Unido. 

Por Martín Camacho

El número de muertes por el nuevo coronavirus (COVID-19) aumenta cada día. Las personas se convierten en estadísticas para los gobernadores y para la sociedad que considera los números como abstractos. Periodistas, científicos sociales, médicos y políticos intentan distribuir toda esta información en hojas de cálculo, gráficos, mapas y escalas logarítmicas sin fin. Los estudios y fórmulas de Carl Friedrich Gauss, considerado uno de los mejores matemáticos de todos los tiempos, vuelven a las noticias en forma de curvas cerradas. Las matemáticas, evaluadas por Gauss como «la reina de las ciencias», se están utilizando para medir la magnitud de los problemas del sistema capitalista. Borrando historias, experiencias y luchas.

El 18 de mayo, se anunció que casi 5 millones de personas se han contagiado en todo el mundo con el virus. La pandemia mató a más de 313,000 trabajadores, mujeres y jóvenes. El coronavirus causó la muerte de más de 15 mil personas en Brasil. El país ocupa el cuarto lugar en el ranking de las naciones más afectadas por el nuevo virus. En esta competencia mortal que muestra la ineficacia del sistema capitalista, el país tropical está compitiendo con los Estados Unidos, Rusia y el Reino Unido. Somos bombardeados diariamente con números y datos. El ser humano evidentemente se ha vuelto desechable. Muchas víctimas ni siquiera han tenido la oportunidad de celebrar un funeral o despedirse de sus seres queridos.

Con el lema «Brasil no puede parar», el gobierno de Jair Bolsonaro muestra su discurso genocida al mundo. Los números son presentados todos los díasal capitán retirado por su equipo técnico incompetente. La prensa también está interesada en presentarle al asesino, el repentino aumento de víctimas. Algunos gobernadores amenazan con implementar el “lockdown”, un término inglés que se refiere al bloqueo total de las actividades económicas. Podemos resumirlo en «bloquear todo». Y los números siguen siendo abstractos y la población sigue siendo culpada de estar mal informada. La forma en que los políticos están lidiando con la tragedia viral es cada vez más atomizar a la sociedad.

Al contrario de lo que los gobiernos han hecho, miles de brazos de trabajadores solidarios se pusieron a ayudar con sus fuerzas. Se vieron infinitas formas de solidaridad en todos los países, y Brasil no es diferente. Más allá de gobiernos corruptos y traidores a los trabajadores, ellos se levantan independientemente para enfrentar una pandemia causada exclusivamente por la sed de explotación capitalista al destruir los ecosistemas.

Uno de los ejemplos de no dejar que los números hablen por sí mismos …es la iniciativa de reconstituir la trayectoria de cada brasileño que perdió la vida por el coronavirus nacida con el proyecto llamado Innumerable . Esta plataforma es una iniciativa del artista Edson Pavoniy funciona como un monumento virtual. Es una herramienta que da voz al dolor basada en informes de amigos y familiares. Cada formulario completado es un recuerdo, una historia y una lucha diferentes. Es necesario fortalecer esta iniciativa, traer experiencias al mundo y demostrar que la pandemia no son solo números. “No hay nadie a quien le guste ser un número. La gente merece existir en prosa ”. Es con esta frase que la plataforma revive las historias de las personas y destaca la frialdad con la que estamos lidiando en toda esta situación. (Acceso: innumerable.com.br).

Una de las frases de Gauss para trazar una realidad totalmente diferente, fuera de un número en sí mismo dice: «Debemos admitir humildemente que, si bien los números son puramente productos de nuestras mentes, el espacio tiene una realidad fuera de nuestras mentes, de modo que no podemos describir completamente sus propiedades a priori ”. Es decir, mientras vemos estas cifras que día tras día nos informan los medios de todo el mundo, por detrás hay una realidad mucho más dura. Cuando nos demos cuenta del desastre que causa el capitalismo, será el momento de su fin, junto con los líderes de turno que jugaron con la vida de las personas.El genocidio es claro y resuelto, Bolsonaro lo ha dejado correr desde el comienzo de la pandemia, y por esta razón tiene que ser juzgado por genocidio. La destitución de los ministros de salud muestra que quienes no están de acuerdo con esta política de exterminio están fuera del gobierno. Es por estas razones que tiene que ser expulsado y juzgado por los crímenes cometidos. No queremos seguir poniendo números, pero la comparación con otros países de la región y del mundo muestra que Brasil es, y puede ser, durante mucho tiempo, el epicentro de la enfermedad en todo el mundo. Es por eso que tenemos que derrotar a Bolsonaro lo antes posible.