Argentina: Vigilia en el Congreso hasta que el aborto sea ley

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  • El #29D es como la final de un mundial. Sigue ganando el medioevo o ganan las pibas. Está en juego que ganen los mismos de siempre, el oscurantismo, los papas, los reyezuelos dueños de las provincias, esos encumbrados señores que se manejan como en el medioevo. O que ganemos las y los de abajo.

Las Rojas

Que logremos imponerle el aborto legal a esa cueva hedionda que es el Senado, sería un paso enorme en primer lugar para que las mujeres y personas gestantes no tengamos sobre la cabeza la amenaza de muerte que es el aborto inseguro. Pero también un enorme abrazo a las mujeres salvadoreñas, país donde hay cientos de mujeres presas por abortar. Y para nuestras hermanas y hermanos chilenxs, que siguen movilizadxs para sacarse de encima el régimen pinochetista. Un aliento enorme para el pueblo brasilero que resiste al protofascista de Bolsonaro. Sería un abrazo a miles de kilómetros con el movimiento de mujeres de Polonia, que están movilizadas para que el reaccionario gobierno no les restrinja aún más el acceso a la I.L.E.

Gana el rey del Vaticano o les arrancamos una conquista para los pueblos de Latinoamérica. Esa es la batalla del #29D.

Los guardianes del orden

La interrupción voluntaria del embarazo también podría llamarse ley de maternidad voluntaria. La libre elección de ser madres o no, cuándo serlo, cuántas veces, es una cuestión de libertad sexual. De libertad para decidir siempre sobre nuestro cuerpo. Es una cuestión para toda la sociedad, porque también hace a la libertad en la sexualidad de lxs pibxs, de lxs trans, de todas las personas. Eso es lo que tanto resguardan los domesticadores del sistema.

Muchos de esos están en el Senado. Ese reducto representa los poderes más concentrados, el de los caudillos de las provincias, el de los terratenientes y los curas, el de la profunda convicción de que lxs pobres no son más que mano de obra para garantizar su opulencia, el de los hijos del poder que todavía hoy organizan salidas para “ir a cazar chinas” y salen impunes gracias a sus parientes fiscales, comisarios y jueces. Por eso no confiamos en charlas y llamadas telefónicas a esos señores que un día dicen una cosa y al otro día votan otra.

La batalla es en Congreso

Los funcionarios del gobierno, las ex militantes feministas convertidas en barniz feminista del gobierno, las dirigentes de la campaña nacional por el derecho al aborto, nos dicen que miremos la sesión por una pantalla y desalientan toda movilización. El gobierno, que envió la ley al congreso, les regala media plaza a los antiderechos, como si fuera cierto que hay dos mitades. Es verdad que hay que ser cuidadosxs porque la pandemia no terminó. Es cierto que hay que mantener cierta distancia, usar el barbijo y el alcohol en gel. ¡Lo que no es cierto es que solo confiando en mirar por una pantalla y creer en la magia se pueda obtener el aborto legal!

El gobierno, las funcionarias y la dirección de la campaña le dicen a la marea verde “quédense tranquilas, que sale”. ¡Hacen peligrar que salga la ley! La única garantía de que se apruebe la interrupción voluntaria del embarazo es que seamos miles y miles en Congreso y en todas las plazas donde está el poder de las provincias, para que esos dinosaurios sientan miedo de la mayoría social que quiere la libertad de decidir para las mujeres y personas gestantes.

Cuando fue la votación en diputados el 13J de 2018, hasta último minuto los rumores decían que no salía la media sanción. Fue el miedo que tuvieron a esas millones de personas movilizadas en todo el país lo que hizo que finalmente se aprobara. No hay magia, no hay brujería, no hay poroteo que garantice torcerles la voluntad a esos honorables miembros del conservadurismo. Por eso tenemos que ser miles levantando la voz y poniendo nuestro cuerpo, nuestros cantitos, nuestra fuerza en acción para imponerles lo que para la sociedad ya debería ser ley hace rato: la libertad de decidir sobre nuestro cuerpo y la maternidad deseada. Lo hicimos en 2018, bajo un frío extremo y bajo la lluvia. Lo hicimos el 10D con un calor insoportable. Lo hicimos convenciendo a la sociedad con nuestras acciones, cada vez que quisieron obligar a una niña a ser madre, con lxs pibxs convenciendo en las escuelas, en las calles, en los pañuelazos, con las trabajadorxs en los paros de mujeres, cada 8 de Marzo y cada movilización por NiUnaMenos. El #29D vamos por un triunfo histórico para las mujeres, la diversidad y nuestrxs hermanxs de toda Latinoamérica.

Las Rojas nos estamos organizando en todos lados para la vigilia, para ser parte de esas miles que hagamos historia, conquistando un derecho para todas las mujeres, para los personas gestantes y para las futuras generaciones, ganando terreno para la emancipación general, especialmente para toda Latinoamérica, socavando el poder de esa institución mundial de la pedofilia y la opresión que es la Iglesia católica. Sumate con Las Rojas a la vigilia, al agite y la fuerza de nuestra batucada para que los dinosaurios empiecen a desaparecer.

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