Ministerio de Educación deberá cerrar en setiembre del próximo año

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  • A partir de setiembre del 2022 se comienza a agotar el presupuesto para becas, transporte, gastos de alimentación, mantenimiento y salarios del personal de los comedores.

Johan Madriz

El proyecto de presupuesto nacional del próximo año está demostrando ser uno de recortes despiadados, profundizando las medidas ajustadoras del gobierno sobre los sectores populares.

La educación es uno de los sectores más afectados no solo por los recortes, sino, por las desigualdades generales del país que les han impedido a miles de estudiantes acceder a los medios digitales para recibir lecciones durante la pandemia.

El presupuesto del Ministerio de Educación será de ₵2.56 billones el próximo año y solo crecerá 0.2%, incumpliendo un año más el mandato constitucional de asignar el equivalente al 8% del PIB a la educación. Según la jerarca de la cartera, el Ministerio de Hacienda ajustó ₵293 mil millones menos con respecto al plan de gastos presentado, ajustando unilateralmente todas las partidas.

En una comparecencia la ministra Cruz expresó: “con los recortes del presupuesto 2022, a partir de noviembre del 2022, quedarán sin servicio de alimentación y comedor 850.000 personas beneficiarias. En setiembre del próximo año, 165.000 personas dejarán de contar con transporte estudiantil y 4.000 sin beca de postsecundaria. También, en octubre, más de 5.000 cocineras contratadas por las juntas de educación y administrativas se verán perjudicadas con su remuneración”[1].

En cuanto al rubro de infraestructura y equipamiento el presupuesto se reduce un 56%, es decir, ₵15 mil millones. Esto llevó al ministerio a emitir una circular ordenándole a los centros educativos no realizar trabajos de mantenimiento de infraestructura en los “próximos años” debido a “la cultura de austeridad que se ha solicitado al Gobierno Central como mecanismo paliativo de la crisis que enfrenta el país”[2]. Luego, por lo escandaloso de la medida tuvieron que derogar el mandato, sin embargo, lo cierto del caso es que el presupuesto efectivamente impedirá brindar el correcto mantenimiento.

De esta forma, a partir de setiembre del 2022 comenzaran a suprimirse becas, transporte, gastos de alimentación, mantenimiento y salarios del personal de los comedores (un servicio que al parecer es esencial solo cuando tiene que ver con huelgas).

Por su parte, los diputados y las diputadas reclaman el porqué de estos recortes, y argumentan que se debieron recortar los salarios. No hay que caer en ese discurso burgués, no deberían sacrificarse ni los beneficios del estudiantado ni los salarios del personal docente. Es un descaro que se posicionen como defensores de la educación cuando fueron quienes instauraron la regla fiscal que guillotina el presupuesto, cuando fueron quienes aprobaron el plan de ajuste del FMI que hipotecó el país, cuando fueron quienes aprobaron el ingreso a la OCDE que pretende mercantilizar la educación.

Hay que oponerse a este ajuste en la educación y, por el contrario, hay que fortalecer el sistema educativo garantizando acceso a equipo e internet, transporte, alimentación y becas, asegurando salarios dignos a los maestros y las maestras. Hay que torcerle el brazo al gobierno en las calles para asegurar el futuro de la juventud.


[1] “Diputados cuestionan a jerarca del MEP por sacrificar ayudas para alumnos en presupuesto de 2022”. En www.nacion.com

[2] “MEP prohíbe dar mantenimiento a escuelas por los próximos años”. En www.nacion.com

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