Hoy (15/09/2022) se realizaron varios cierres de edificios en las instalaciones de la Universidad de Costa Rica (UCR) por problemas de pagos de ciertos componentes salariales adeudados desde el año 2020, cuando la rectoría de manera unilateral congeló los salarios, aún cuando ni siquiera había entrado en vigencia la Ley 9635, el Plan Fiscal de Carlos Alvarado.
El movimiento de protesta se da bajo una creciente presión sobre los bolsillos de quienes trabajan, que deben soportar una inflación que alcanza ya el 12,13% lo que afecta la capacidad adquisitiva y las condiciones de vida de quienes vienen de un salario. Además, se realiza después de 3 años de inmovilidad política producto de la pandemia y la ley anti-huelgas aprobada durante el anterior gobierno.
Ninguna otra universidad pública congeló los salarios de sus trabajadores y trabajadoras como si lo hizo la rectoría de la UCR. Incluso la Oficina Jurídica de la UCR brinda una respuesta favorable al sindicato en abril de 2022, reconociendo que se debe pagar la inflación y el escalafón, ante lo cual se inician negociaciones para el pago de lo adeudado.
Durante el año 2022 entre la administración y el sindicato se llegó al acuerdo de reconocer el pago de 0,89% de inflación a diciembre de 2020, y que empezaría a regir en enero de 2021, los cuales han sido irrespetados por la administración.
Por esto salieron a protestar hoy, porque se les debe 0,89% de la inflación desde enero de 2021 hasta la fecha y se están irrespetando los acuerdos mencionados y los derechos laborales establecidos en la Convención Colectiva.
El movimiento convocado por el Sindicato de Trabajadores de la UCR (SINDEU) tuvo un importante apoyo de la clase trabajadora, después de tres años de desmovilización de la clase trabajadora universitaria.
Los cierres se sostuvieron en horas de la mañana en los siguientes puntos del campus Rodrigo Facio: Facultad de Odontología, Ciudad de la Investigación, Instalaciones Deportivas, LANAMME, CINA, Antigua Ingeniería, Tecnologías en Salud y los Edificios Administrativos A, B y C. También hubo cierres en las sedes del Pacífico, Guanacaste y Caribe, así como los recintos de Esparza y Santa Cruz.
Apoyamos la lucha por el pago de lo adeudado y llamamos a la clase trabajadora universitaria a empezar una campaña por un aumento real en los salarios, que se ajusten al costo de la vida y reconozca la inflación. Llamamos también al estudiantado a solidarizarnos con esta lucha que tiene similitud con la necesidad de ajustar los montos de las becas de manera que crezcan con respecto al costo de la vida.
