13% de lo vegetales consumidos tienen altos niveles de plaguicidas

El 64% de los vegetales que se consumen en el país tienen residuos de plaguicidas.

0
87

Los resultados de un análisis de residuos en vegetales para consumo humano realizado por el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) determinaron que el 13% no cumplió los niveles permitidos por la normativa de plaguicidas, es decir, mostraban concentraciones altas de estos químicos. Pero, además, solo un 36% no mostró ningún residuo químico.

Para el estudio se tomaron muestras de 2.629 vegetales frescos, de los cuales 1.420 fueron de producción nacional y 1.209 de productos con intensión de importación (aduanas). El problema se presenta específicamente con la producción nacional, ya que el 99% de los importados cumplió los parámetros.

Según el SFE dentro de los motivos de estos incumplimientos se puede señalar el mal uso de los productos, el irrespeto al periodo de carencia (tiempo entre la última aplicación y la cosecha), la sobredosificación y la alta carga química aplicada. Definitivamente la explicación se puede sustentar en el uso indiscriminado de estos productos. Según datos de la FAO Costa Rica es de los mayores consumidores de plaguicidas del mundo con una utilización de 18,2 kg por hectárea.

Además, en el país se utilizan alrededor de 133 ingredientes activos de plaguicidas considerados altamente peligrosos por sus implicaciones en la salud y el medio ambiente y que, en algunos casos, están prohibidos en otros países, por ejemplo, el paraquat y el metamidofós (insecticida prohibido en 102 países).

Actualmente existen recursos legales contra el paraquat y el diquat que son herbicidas altamente tóxicos para los suelos y el agua, además de provocar afectaciones serias, crónicas e irreversibles en los pulmones. Ya informes de distintos ministerios señalaron la necesidad de su prohibición debido a que “reflejan preocupaciones sobre los efectos que se generan sobre el ambiente por el uso de este producto como herbicida. Por ejemplo, la contaminación de aguas subterráneas y del suelo, así como la muerte de organismos que son la base de la cadena trófica, lo cual desestabiliza el equilibrio natural de los ecosistemas”.

A inicios de este año, trabajadores de la Standard Fruit Company alertan de afectaciones severas en su salud por la aplicación del insecticida Movento 15 OD. Según sus denuncias sufren de irritación en la piel, ampollas en la zona genital, fiebre, náuseas, mareos, dolores de cabeza y dificultades respiratorias. También, en los últimos años centros educativos en zonas rurales han reportado afectaciones entre sus trabajadores y estudiantes debido a la fumigación aérea, que descontroladamente lanza los químicos demasiado cerca.

Esto hace parte del capitalismo agroproductor que explota la naturaleza y a los trabajadores y trabajadoras en grandes monocultivos que agotan los minerales de la tierra y desequilibran completamente los ecosistemas, por lo que utilizan grandes cantidades de agrotóxicos para mantener y mejorar los rendimientos en pro, únicamente, de la generación de ganancias. Por esto, es necesario un modelo productivo y de relación con la naturaleza diferente, que en el marco del capitalismo es imposible, la única opción es anticapitalista y ecologista.

Sumate a la discusión dejando un comentario:

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí