• El gigante asiático se consolida como el epicentro mundial de la segunda ola del coronavirus y ya es el segundo país con más contagios desde que comenzó la pandemia a nivel global. La situación sanitaria está totalmente colapsada.

Redacción

Con más de 17 millones de casos confirmados y al borde de superar la barrera de los 200.000 fallecidos, India está atravesando la que es actualmente la peor situación mundial en lo que a la pandemia se refiere.

El país asiático de más de 1.300 millones es actualmente el epicentro global de la Segunda ola, y la situación está completamente desbordada. Con hospitales colapsados, falta de camas y de oxígeno, la subida de contagios de las últimas semanas fue como una estampida.

Hace seis días consecutivos que India registra más de trescientos mil casos confirmados y dos mil muertes diarias, habiendo roto su propio récord ayer, cuando el Ministerio de Salud de ese país confirmó 352.991 casos positivos, el mayor registrado hasta la fecha.

Con números de estas magnitudes, se ubica segundo en el ranking de países con mayor cantidad de contagios confirmados, sólo superado por los más de 31 millones de casos de Estados Unidos. Además es el cuarto país con más decesos por Covid-19, después de Estados Unidos, Brasil y México.

Colapso

La OMS calificó la situación de «desgarradora». En la mayoría de los hospitales de Nueva Delhi no hay más lugar para atender a los enfermos, o no hay oxígeno suficiente para atender a todos quienes lo necesitan. Muchas personas mueren en los pasillos o en las puertas de los centros de salud.

Pero no es sólo en la región de la capital. El 71% de los casos están concentrados es 10 regiones, con el Estado de Maharashtra a la cabeza. Esta concentración de casos en ciertas regiones del país junto con la alta tasa de infección de la nueva variante del virus que surgió allí ha colaborado en el desborde del sistema sanitario.

El desborde en los hospitales y la imposibilidad de tratar a los enfermos ha repercutido en una disparada del número de fallecidos, haciendo que colapsen también los cementerios y las salas crematorias.

Al respecto, la situación de colapso también ha dado lugar a accidentes que produjeron situaciones trágicas. El miércoles pasado una falla en la provisión de oxígeno de un hospital de la ciudad de Nashik, producto de una fuga, causó la muerte de 24 pacientes que estaban siendo tratados de Covid-19.

Dos días después, otras 13 personas murieron en una localidad a las afueras de Bombay, donde un hospital se incendió. Todos los fallecidos eran pacientes infectados con coronavirus. Aunque no se determinó todavía, se investiga si el incendio tuvo que ver con el desborde del crematorio debido a la alta cantidad de muertos.

Este suceso se repite luego de que otro incendio haya afectado a un hospital de Bombay, el mes pasado, donde se estima que murieron otras 10 personas.

Ayuda internacional

La terrible situación ha llevado a que otros países decidan enviar ayuda para combatir la crisis sanitaria.

Además de la propia OMS, Reino Unido ha enviado respiradores y tubos de oxígeno. También Australia y Estados Unidos, a través del Departamento de Estado, anunciaron que ya están enviando ayuda en forma de respiradores, mascarillas y material para la fabricación de vacunas.

Incluso Pakistán, un país históricamente enfrentado a la India, ha ofrecido la provisión de equipos médicos.

El caso de la India refleja con toda brutalidad la persistente presencia de la pandemia en la realidad social y política mundial, de la mano con la lenta y sobre todo desigual vacunación que impera en el mundo bajo la lógica capitalista.