Crisis para Bolsonaro: renuncia Weintraub al Ministerio de Educación

0
17

 

  • El descarado oscurantista había asumido el puesto de ministro en abril del año pasado. Es el segundo titular del Ministerio de educación bolsonarista que cae.

Por Redacción

Hacía ya varios días que circulaba el rumor de que Weintraub no se podía sostener en su puesto por mucho tiempo. Las crecientes movilizaciones en las calles de los últimos días habían puesto sobre la mesa la exigencia de su renuncia, y así fue. Se trata de una manifestación de una crisis más general para el gobierno de Bolsonaro, que se encuentra debilitado de manera creciente por su gestión negacionista y genocida de la pandemia, por sus crecientes conflictos con los otros poderes del estado, etc.

El ministro saliente estaba lejos de ser un profesional en cuestiones educativas: es en realidad un economista ultra derechista, ignorante y oscurantista que asumió el cargo para arrasar con la educación pública. Su antecedente de servicios antes de ser ministro había sido fundamentalmente ser uno de los mayores impulsores de la reforma jubilatoria que ajustó a millones de trabajadores y su futuro retiro.

Estaba prácticamente acorralado por escándalos recientes que se sumaban a su gestión privatista, ignorante y oscurantista. El último caso que lo salpicó fue participar de una movilización de extrema derecha contra la cuarentena sin usar barbijo, por lo que fue procesado por atentar contra la salud pública. Luego, ya de manera directa como funcionario, se encontraba procesado por la difusión descarada de fake news, con las que buscaba embarrar la opinión pública para poder implementar sus políticas. La última fue cuando afirmó que las universidades federales eran centros de plantación de marihuana (!) para poder justificar el ajuste a su presupuesto.

Su confrontación y odio a las universidades públicas se había hecho notorio previamente cuando intentó intervenir de manera autoritaria en ellas. Hizo el intento de centralizar en él mismo la designación a dedo de todos los rectores de manera tal de tener un control directo sobre todas las universidades del país, pasando por arriba de todo resto de autonomía académica y avanzar con su ideología ridículamente oscurantista.

El ministro también se vio envuelto en el escándalo el año pasado con las ENEM (Examen Nacional de Enseñanza Media), una prueba generalizada en las secundarias que ha venido cumpliendo el rol expulsivo de determinar quien tiene mayores posibilidades de llegar a la educación superior según sus resultados. Hizo una campaña personal sobre «la mejor ENEM de la historia» y cosechó un escándalo tras otro al punto tal que la publicación de los resultados tuvo que ser suspendida. Primero se hizo público un escándalo de sobreprecios, con la asignación sin licitación de la impresión de las pruebas a una empresa por más de 157 millones de reales. Luego, nada de ellas se pudo dar de manera regular, con el sistema online sin funcionar, judicialización de los resultados, etc.

El último escándalo en el que se vio envuelto fue cuando sostuvo que había que meter presos a todos los miembros del STF, la Corte Suprema brasilera.

Sumate a la discusión dejando un comentario:

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí