Coronavirus: Chile entra en fase 4 sin tomar medidas de fondo

0
13
  • El gobierno de Piñera abandona a la población a su suerte mientras pone el foco en usar la crisis del Coronavirus contra la rebelión.

Por Nicolas Mestre

Al momento de escribir estas líneas el COVID-19, más conocido como Coronavirus, se encuentra poniendo en jaque las políticas de los Estados para hacerle frente. Según los datos de la Organización Mundial de Salud (OMS) el virus ya lleva un total de 132 mil personas contagiadas en 123 países, y más de 5 mil fallecidos por su causa, afectando desigualmente a países y grupos poblacionales de riesgo, mientras “Europa se ha convertido ahora en el epicentro de la pandemia, y presenta más casos y muertes notificadas que todo el resto del mundo, al margen de China”, según lo informado por el director de la entidad en la rueda de prensa del pasado viernes 13 de marzo (1).

Cabe señalar que el virus ha planteado una serie de desafíos generales para los Estados del orbe, desde el cuestionamiento a la capacidad de los respectivos sistemas de salud para enfrentar una problema de salud de manera coordinada (2), hasta la fragilidad de la economía mundial que ya venía ralentizada anteriormente y que parece entrar en una fase de recesión (3).

Una muestra de lo que venimos planteando es la abrupta caída que tuvieron las bolsas de comercio del mundo. Por segunda semana consecutiva, Wall Street tiene su “lunes negro”, cerrando sus transacciones a la baja, al igual que todas las bolsas de América Latina (4).

Mientras en Chile, vertiginosamente pasamos de la fase 3, declarada el día sábado, que es cuando ya no se pudo realizar la trazabilidad de los casos, a la fase 4 el día de ayer, cuando ya el virus ha comenzado su propagación exponencial en la comunidad, registrándose al día de hoy 201 casos, 126 casos más que el día domingo, cuando se contabilizaban 75.

Del mismo modo, se vio reflejado en la economía, siendo particularmente abrupta la caída de las acciones registrada por la Bolsa de Comercio de Santiago el día de hoy, un 14,5%, la caída más significativa en 30 años (5), sumado a la caída internacional del precio de los commodities (materias primas), el cobre, la principal fuente de financiamiento estatal, se cotizó a la baja un 6%, el precio más bajo en 3 años (6).

Siendo ese el escenario, el gobierno chileno ha enviado mensajes contradictorios hacia la población mientras toma una serie de medidas, insuficientes para hacer frente al problema tanto epidemiológico como económico y social que el desarrollo de la enfermedad ha planteado.

Una muestra de lo que venimos señalando fue lo planteado por el cuestionado Ministro de Salud, Jaime Mañalich, tristemente conocido por su frase de que en Chile “tenemos uno de los mejores sistemas de salud del planeta”, quien señalara a comienzos de marzo, cuando recién se registraban los primeros casos en el país que “la posibilidad de que millones de personas vayan a emitir masivamente su voto, que hagan una fila prolongada, unos junto a otros, esto con un brote de Coronavirus severo, más que un problema sanitario será un problema político”, y recientemente el día sábado se negaba a la posibilidad de cerrar escuelas y otros centros, cuestionando que esa fuese “una medida razonable”.

A pesar de la negativa inicial del gobierno de tomar medidas efectivas, Piñera se vio obligado por los hechos a anunciar la suspensión de las actividades escolares en todos los centros educacionales públicos, subvencionados y particulares, por 14 días, el cierre de las fronteras a partir del día miércoles por un lapso de 15 días. Agregaron en la conferencia de prensa de hoy la restricción de “ceremonias, eventos o actos públicos” que no fuesen “estrictamente necesarios”, sin que puedan superar las 50 personas, más restrictivo aún de lo que se anunciase a través de la página del Ministerio de Salud como medida para la fase 4, donde se planteaba un máximo de 200 personas, dando luces además de recurrir a las fuerzas armadas en caso de ser necesario.

En este sentido, para el deslegitimado gobierno de Sebastián Piñera, el coronavirus aparece como la coartada perfecta para desmovilizar a las masas que han irrumpido con fuerza desde el comienzo de la rebelión popular el 18 de Octubre del año pasado, limitando a su mínima expresión el derecho de reunión e insistiendo en la eventual necesidad de postergar el incómodo escenario del plebiscito constitucional del próximo 26 de Abril, para Junio u Octubre…

Por otra parte, las medidas anunciadas resultan absolutamente insuficientes cuando solo en el metro subterráneo de Santiago la afluencia de usuarios fluctúa en torno al millón de personas, la mayoría trabajadores de todos los sectores económicos que continúan en sus funciones. Mientras, los precios de los insumos necesarios para la prevención han mostrado un alza solamente explicable por la especulación de los capitalistas que no trepidan en lucrar con la necesidad sanitaria del país.

Es que, en definitiva, los límites para la toma de medidas efectivas tienen relación con el cuestionamiento del modelo económico y social del capitalismo chileno de la postdictadura, donde prima el lucro sobre todas las esferas de la vida -como es en este caso, la salud de toda la población-  .

Así, una serie de medidas resultan imprescindibles en este momento. De partida, para hacer efectiva la cuarentena, el gobierno debiera suspender las actividades económicas y laborales a las estrictamente imprescindibles  para la provisión de suministros y artículos de primera necesidad. Prohibir los despidos garantizando a los trabajadores la paga total de su sueldo, mientras dure la emergencia. Proponer un presupuesto de emergencia sanitario que permitiera dar cobertura universal de salud en la detección y tratamiento de la enfermedad, para ello debiese tomar control de todas las redes de salud disponibles, particularmente las del sector privado, para garantizar la atención a toda la población, de modo tal de evitar el colapso de la precarizada red de salud del sector público, que arrastra hace décadas un grave desfinanciamiento. Realizar un férreo control de precios sobre los artículos de prevención (alcohol gel, mascarillas), insumos médicos, y artículos de primera necesidad, que impida la especulación capitalista. Poniendo a disposición en los distintos lugares de afluencia de público (metro y otros servicios públicos) dispensadores gratuitos de alcohol gel. Entre otras acciones.

Sin embargo, no parece que el gobierno de Piñera fuese a realizar ese tipo de medidas, pues precisamente su rol hoy en día pasa por ser garante de los intereses de la clase capitalista, que mantiene la salud como un servicio pago, donde quien tiene los recursos suficientes paga por un tipo de salud y compra los implementos necesarios para enfrentar la propagación del virus.

Por eso resulta imprescindible conformar en los distintos lugares de trabajo Comités de Higiene y Seguridad que sean independientes de la administración de la empresa, que llamen a exigir a las autoridades el que se implementen estas medidas, si fuese necesario llamar a paro o huelga, tal como vienen desarrollando desde abajo los trabajadores y sectores populares de Italia, uno de los países más golpeados por el virus en Europa, donde en este momento se desarrollan huelgas de trabajadores en grandes empresas de Milán, Mantua, Brescia, Terni, Marghera, Génova, huelgas que no son “por el salario sino por la dignidad”, demandando “higienizar, asegurar y reorganizar los lugares trabajo” (6).


Referencias

(1) Alocución de apertura del Director General de la OMS en la rueda de prensa sobre la COVID-19 celebrada el 13 de marzo de 2020. Sitio web consultado el 16/03/2020:  https://www.who.int/es/dg/speeches/detail/who-director-general-s-opening-remarks-at-the-mission-briefing-on-covid-19—13-march-2020

(2) José Luis Rojo, Seis anotaciones sobre la pandemia global y el capitalismoIzquierda Web, 12 de marzo de 2020.

(3) Marcelo Yunes, Del “cisne negro” a una posible recesión globalIzquierda Web, 12 de marzo de 2020.

(4) Heloísa Mendonça, Federico Rivas Molina, Rocío Montes, Las Bolsas de América Latina acompañan el derrumbe global, El País (España), 16 de marzo de 2020.

(5) Patricia Marchetti M., Bolsa de Santiago se derrumba más de un 14% y anota su mayor caída en más de 30 añosEl Mercurio, 16 de Marzo de 2020.

(6) Raúl Zibechi, Italia: Coronavirus y la infinita solidaridad entre los de abajoIzquierda Web, 16 de marzo de 2020.

Sumate a la discusión dejando un comentario:

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí