• Ante el avance de la ocupación en Kobane por parte del ejército del Estado Islamico (EI) un grupo de valientes mujeres kurdas inician una experiencia de organización armada.

Martine Luxemburgo y Santiago Damiani

El documental (2018), dirigido por la catalana Alba Sotorra, toma como protagonista a una comandante de la Unidad de Protección de las Mujeres llamada Arian para sumergirse en la pelea por la emancipación femenina en la región siria de Kurdistán y contra el Califato Islámico. Incluso, la directora expresa como debió adaptarse a las condiciones de vida tan poco occidentales de las guerrilleras y el vínculo que forjo, la llevó a regresar para cuidar de Arian cuando estaba gravemente herida, mientras documentaba sus actividades.

Lo primero que nos muestra el film es a Arian alejada de sus compañeras, recuperándose de varias heridas de bala, y anhelando volver al frente de batalla. Ella está organizada dentro de las Unidades de Protección Femenina (YPJ-YPG) creadas en el año 2013, que responde a las Fuerzas Democráticas Sirias. Esta organización tiene como fin formar grupos guerrilleros que luchan contra el yugo que padecen las mujeres en esa región de Asia, contra el avance del Daesh o Estado islámico y la coexistencia pacífica de los estados kurdos con otros de la región. Cabe destacar que el​ ejército de liberación, independientemente de estar conformado preponderantemente por mujeres, también es diverso en sí mismo, ya que cuenta con la presencia de jóvenes compañeros que se sumaron a las filas del YPJ-YPG. Lo cual posibilitó la masificación y el desarrollo de una lucha a brazo partido en condiciones sumamente adversas, que se manifestaban entre otras cuestiones, en los armamentos con los que contaban para combatir (armas livianas y un tanto precarias).

A medida que avanza el documental, vemos cómo las mismas mujeres cuentan sus motivaciones para unirse a la guerrilla, escapando de un régimen religioso opresivo y violento, y relatan las dificultades que presenta alejarse de la familia en un contexto bélico. En una de las escenas más importantes y conmovedoras, Arian visita al padre de uno de los principales compañeros caídos, quien se ha transformado en un símbolo de resistencia nacional.

La batalla por liberar Kobane se sitúa en la historia de esta pequeña ciudad ubicada al norte de Siria como un punto de inflexión en la historia de Medio Oriente sin precedente alguno, ya​ que posibilitó el inicio de una experiencia de organización y lucha desde abajo, que no solo cuestionó al régimen ultrarreaccionario y genocida, sino que logró derrotar a un sector del EI. Hecho que permitió sentar las bases para la organización de los sectores más oprimidos de la población siria y llevar a cabo el ejercicio pleno de participación política-ciudadana en los asuntos que atraviesan el conjunto de las dimensiones que hacen a la vida cotidiana. Con el apoyo de amplios sectores de la población rural que reside allí, la hazaña de Kobane logró contrastar parcialmente las profundas desigualdades que dividian a ambos sectores en guerra, principalmente en el acceso a recursos materiales y medios de subsistencia fundamentales. Si bien las guerrillas por la liberación, a medida que avanzaba la resistencia kurda, lograron llegar a determinados sectores que se unieron a combatir contra el EI, surgen como iniciativa de un pequeño sector de vanguardia integrado por mujeres sirias.

Es en este sentido que el rol de las mujeres se presenta como un componente crucial, del cual se debe partir para analizar esta experiencia. Si bien la opresión patriarcal anida en cada lugar del mundo, en determinados sectores, debido a su contexto social, económico, político y cultural, dicha opresión adopta rasgos característicos y brutales. En el caso de las mujeres de Medio Oriente, la cuestión de género se ve atravesada por un recrudecimiento combinado por una cultura signada por una religión que lxs somete a una estructura patriarcal más aguda y el atraso respecto del desarrollo productivo, que dista del mundo moderno. Situación que agrava las condiciones, trayectorias y perspectiva de vida de las mujeres que habitan este lugar del mundo.

El triunfo de la resistencia kurda implicó progresivas transformaciones de base en las localidades del norte de Siria, Kobane y Rojava. Tras derrotar al Daesh, el ejército vencedor comenzó junto a la población de allí una experiencia de verdadera democracia independiente, que se tradujo en la fundación de espacios de organización (comités y asambleas), formación y nuevas formas de organización colectivas. Un precedente sin igual en la lucha por la liberación del yugo opresor de los gobiernos profundamente reaccionarios y patriarcales de Medio Oriente y sus ejércitos. Una experiencia que, pese a tener sus limitaciones políticas estratégicas, evidencia la importancia de la organización independiente, a la vez que retrata la lucha de las mujeres contra la opresión, en un contexto dramático, donde la radicalización de la lucha se convierte en menester, y los fusiles en manos de lxs oprimidxs se transforman en liberación.

Esta cinta se encuentra disponible de forma gratuita con subtítulos en español en vimeo https://vimeo.com/330853056